Desde el PP han llegado graves descalificaciones, como las afirmadas por la alcaldesa de Fuengirola, Esperanza Oña, quien llegó a equiparar en Twitter a Pablo Iglesias con Adolf Hitler, al afirmar: “Hitler ganó las elecciones en Alemania aprovechando el descontento general y convirtiéndolo en ilusión a su favor“.
El propio presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se ha dedicado en actos del PP a atacar a Podemos, aunque lo ha hecho mayoritariamente sin citarles expresamente.
“No podemos jugarnos el futuro de nuestros hijos a la ruleta rusa de la frivolidad, la incompetencia y el populismo. No podemos”, afirmó sobre la formación de Pablo Iglesias en la Convención del PP, en enero pasado. Rajoy no ha dudado en referirse a Podemos como “radicalismo de izquierda” y “experimentos que surgen y desaparecen”.
La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, en una entrevista en Onda Cero, el 6 de noviembre pasado, ha dicho tener “bien claro” que “Podemos es un partido “populista, de extrema izquierda”, cuyo “modelo es Venezuela”, y que es “muy peligroso para el sistema, para la democracia, la libertad de prensa y todo lo conseguido en este país“.
Cospedal también ha dicho cosas como que “Podemos nació con el régimen venezolano como espejo“, y que Pablo Iglesias bebe de opciones políticas que cuando llegan al poder rompen con la democracia. Ideas defendidas, por ejemplo, en el programa La Sexta noche
En una entrevista con TVE, la candidata del PP a la Alcaldía de Madrid vaticinó que si Podemos gana las elecciones “será la última vez que votemos libremente con justicia independiente, medios plurales y habeas corpus”. Dijo lo mismo en Un tiempo nuevo, de Telecinco
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