El novio de Ayuso no será juzgado solo por fraude fiscal. La magistrada añade el delito de pertenencia a organización criminal, elevando la petición de cárcel a más de seis años. El entramado incluye facturas falsas, testaferros y un posible soborno encubierto ligado a Quirón, principal beneficiaria de la privatización sanitaria.
No es un caso aislado, es un sistema. La corrupción es la verdadera ideología del poder madrileño.
La palabra organización criminal ya no es un insulto, es un diagnóstico judicial.
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