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lunes, 30 de enero de 2017

Las Rebajas de Enero


Los ladrones, los bancos y los banqueros.


El precio de la luz...no tiene límites.


El Fabuloso Negocio de la Iglesia Católica

La Iglesia gasta casi tanto en publicidad como en sus universidades
La Conferencia Episcopal española se prepara para convencer a los contribuyentes de que marquen la X en la casilla del IRPF.
Público
29-1-17
ANIBAL MALVAR

MADRID.- Comienza febrero y, como todos los años, la Iglesia española se prepara para una de sus liturgias más esforzadas: la de convencer a los contribuyentes de que marquen la X en la casilla del 0,7% del IRPF para la Iglesia Católica. La Conferencia Episcopal se gastará en publicidad para este fin alrededor de cuatro millones de euros (Público se puso en contacto sin éxito con la CEE para afinar el dato).

 En 2014, último ejercicio que las autoridades eclesiales tuvieron a bien incluir en la memoria explicativa a la que están obligados por ley, los obispos declaran haber destinado a esta campaña 3,6 millones. Una cifra muy cercana a los 4,2 millones que invierten en sus facultades eclesiásticas (al margen de la Pontificia de Salamanca, que recibe otros 1,6M€). En total, la iglesia gastó, en aquel 2014, 4.651.000 euros procedentes de la declaración de la renta en anuncios.

El total de recursos recibidos por la curia desde la asignación tributaria asciende en aquel ejercicio a 250,2M€. Un dato que requiere matización, dado que entre el 30 y el 40% de la casilla destinada a ‘otros fines’ (casi 300M€) se deriva también a entidades de titularidad nazarena. Baste decir que tanto Cruz Roja (40M€) como Cáritas (27,6) recogen sus óbolos tributarios desde este otro concepto, que muchos ciudadanos escogen distinguiendo falsamente entre el dinero destinado a la caridad y el que va a solidaridad, términos bien diferentes. Desde que los contribuyentes tienen derecho a decidir el destino de su 0,7%, alrededor de siete millones de españoles optan por la casilla confesional. Teniendo en cuenta las declaraciones conjuntas, esta cifra se eleva a nueve millones.

Juanjo Picó es portavoz de la asociación Europa Laica, que desglosó las distintas contribuciones estatales que recibe la Iglesia Católica de distintas administraciones arrojando la espeluznante –en un estado aconfesional- cifra de 11.100 M€. “Es una vergüenza que esta memoria justificativa la publicite la Iglesia y no la Agencia Tributaria. Como es una vergüenza que las cuentas estén firmadas por Price Waterhouse Cooper (una de las cuatro grandes auditoras del mundo), cuando se limitan a dar fe de lo que se les enseña. No es una verdadera fiscalización”, denuncia Picó.

La opacidad de las cuentas de la iglesia es una de las peculiaridades más singulares de nuestra democracia. Ni siquiera está obligada a declarar las donaciones que recibe, sean un limosna calderillera, una herencia millonaria, el palacio regalado por cualquier marqués en arrebato místico, o los 20 millones que hace dos años Amancio Ortega donó a Cáritas. “Son aportaciones económicas con doble exención”, denuncia Picó. “Por una parte desgravan al donante y, por otra, la Iglesia no tiene que declararlas”.

También la exención de pagar el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) es otra aportación a los obispos que pagan tanto los devotos como los ateos. Incluso si esos bienes son utilizados por la curia para fines lucrativos, como los dos parkings que tiene alquilados en Almería, o uno en Lugo, a distintas empresas privadas. Y no son casos aislados.

También se incluyen en este apartado otras donaciones más peculiares, como las que se obtienen de las entradas que se cobran en catedrales o en la mezquita de Córdoba. “Estos tiques se contabilizan como donaciones voluntarias. Pero no pagues esa donación voluntaria, a ver si te dejan entrar”, bromea Picó.

Desde la Conferencia Episcopal han declinado explicar a Público cuánto dinero tienen previsto invertir este año en la campaña del IRPF, cómo va a ser esta campaña y qué facilidades y ventajas (o no) recibe la iglesia a la hora de adquirir espacios publicitarios. Cáritas, sin embargo, sí ha accedido a reconocer un gasto de 30.000€ para promover la campaña que insta a colocar la cruz en ambas casillas. Una cantidad que puede parecer insignificante. Pero que se ve compensada por la devoción de los medios: “Nos ceden gratis los espacios. Solo invertimos en producción”, señala la responsable de campaña Beatriz García.

Juanjo Picó pide a Público una matización final a sus declaraciones para este periódico: “Me gustaría que se dejara claro que nosotros no tenemos nada en contra de las creencias católicas ni de la Iglesia. Pero sí buscamos una separación neta entre lo público y las creencias privadas”. Amén.




Los Patriotas


Evidentemente Federico Trillo no es trigo limpio.

El general de 20 de las víctimas del Yak-42: “¡Otra vez no, por favor!”
Pide al Gobierno que no vuelva a tomar el pelo a las familias con el homenaje y cuenta su versión de la tragedia: “¿Qué hace usted aquí?”, le dijo Trillo al verlo. No le dejó subir al avión para acudir al lugar del accidente, en Turquía
28-1-17
PÚBLICO
MADRID.- El teniente general Emilio Pérez Alamán, bajo cuyo mando se encontraban buena parte de los 62 militares fallecidos en el accidente del Yak-42, ha rechazado un homenaje genérico a las víctimas por parte de los “los mismos que hace catorce años ya los humillaron por separado” y reclama que, previamente, pidan perdón en persona “quienes obraron mal”, en alusión a responsables políticos como el exministro Federico Trillo.
“¿Qué hace usted aquí?”,  espetó Trillo al general jefe de 20 ingenieros fallecidos sin darle el pésame. No le dejó subir al avión

Bajo el título ¡Otra vez no por favor”, el general Pérez Alamán explica en un artículo que el homenaje de Estado conjunto que se propone a los 62 fallecidos sería por parte de “los mismos que hace catorce años ya los humillaron por separado. Disculpen, pero suena a más de lo mismo”.
“Si aceptan mi opinión -agrega-, el homenaje debe estar precedido por una auténtica petición de perdón personal de todos los que obraron mal y no de un ente genérico como es el Estado, constituido por muchas instituciones y organizaciones que nada tienen que hacerse perdonar”.

El artículo ha sido publicado en el blog del general Rafael Dávila. El teniente general considera que, catorce años después, “aparece de nuevo la disputa como consecuencia de un informe del Consejo de Estado, que varios años después de haberse solicitado, se dicta en Octubre del año pasado, pero se da a conocer varios meses más tarde ¿Por oportunidad política?, ¿Una baza para estrenarse la nueva Ministra? ¿De nuevo [José] Bono y sus papeles? ¿Con las familias como meros instrumentos?”, se pregunta.
El informe del Consejo de Estado llega tras varios años de haberlo solicitado: "¿Por oportunidad política?, ¿Una baza para estrenarse la nueva Ministra? ¿De nuevo Bono y sus papeles?"

Pérez Alemán revela detalles esclarecedores de lo ocurrido aquel 26 de Mayo de 2003, cuando llegó al Cuartel General de la División en Burgos y le comunicaron la noticia del accidente del Yak-42 en el que regresaban a España 20 integrantes del Regimiento de Ingenieros de la Brunete. Como jefe de dicha unidad, puso en marcha “todas las medidas para hacer frente a tamaña tragedia", especialmente para atender a las familias de los fallecidos.

El General Jefe de Estado Mayor le ordenó que se sumara al viaje que el ministro de Defensa, Federico Trillo, y su séquito iban a emprender desde Torrejón rumbo al lugar del accidente, en Trebisonda (Turquía).
“Llego a la Base Aérea minutos antes del despegue -relata-, en la sala de Autoridades está el Ministro con su Jefe de Gabinete y el General de la Fuerza de Maniobra junto a otras personas civiles que no conozco. La cara del Ministro es un poema al verme aparecer. Me presento y sin mencionarme absolutamente nada de los veinte Ingenieros de la División que han perecido, me pregunta nervioso ¿Qué hace aquí? Le contesto el motivo y la posibilidad de colaborar en la inspección que van hacer en la zona. Sin ninguna palabra más se encierra en una habitación de la sala con su Jefe de Gabinete y pocos minutos después éste me dice que no hay sitio en el avión y no puedo embarcar”.

Regresó a Burgos, “a toda velocidad” para estar con las familias y tomar las decisiones necesarias: su prioridad era la dignidad de sus soldados y el respeto a sus allegados, “después de las actitudes observadas en Torrejón”.
Recuerda “el calvario” que pasaron los jefes de unidad de los 62 militares fallecidos en dicho accidente. “La grandeza y generosidad de aquellas viudas jóvenes, padres y hermanos ante el drama que estaban sufriendo, nada tenía que ver con la fría y calculada escena de Torrejón y dejó bien claro en mi interior donde estaría en caso de confrontación, como así fue, entre los intereses espurios de la política y la dignidad de mis soldados y el respeto a sus familias”.
Asegura que mantuvo el conducto reglamentario y la confidencialidad de sus reclamaciones “sobre los posibles errores en la identificación de los cuerpos por las prisas en repatriar los restos y la forma de atender a las familias”.

Por ejemplo: En el caso del funeral de Estado en Torrejón, de cuya mala organización ya se ha escrito suficiente, asumió la decisión de destacar 20 equipos para trasladar los féretros de la División del avión a los túmulos asignados. “Ello obligó a hacer lo mismo con los demás" para evitar así trasladarlos con "una cadena de soldados, como si de paquetes se tratara”.

Les prohibieron abrir los féretros
“Finalizado el funeral, el Ministerio de Defensa “que había obrado hasta entonces sin preguntar, entregó los ataúdes a las respectivas Unidades para traspasarlos a las familias sin más explicaciones. Después hizo mutis por el foro, no sin antes ordenar la prohibición absoluta de abrir los féretros. De esta actuación también se hizo llegar la queja correspondiente al Mando”.

El teniente general Pérez Alemán reitera su agradecimiento a Burgos y a sus autoridades por el funeral público que se realizó después en la base a la que asistió el entonces presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera. “Nada que ver con el de Torrejón, mi general”, fueron las palabras de muchos familiares.

Recuerda también cómo en los meses siguientes “se sucedieron acciones para olvidar por parte del Ministerio con la pretensión de arreglar lo que no tenía arreglo”, mientras la oposición política “aprovechó la ocasión para morder a su oponente y no soltar la presa, Por supuesto sin la menor consideración por lo que estaban pasando las familias, peor aún, utilizando su sentimiento y frustración por el comportamiento del Ministerio”. También recuerda la tensión con el ministro, colaboradores y mandos intermedios, que no resultó “nada gratificante” para él.

“La División se esforzó en todo lo que estuvo en su mano para paliar los efectos que tales acciones. De nuevo la disconformidad con la postura oficial se hizo llegar a la superioridad, que respondió con advertencias, pero no con soluciones adecuadas. En consecuencia y con la máxima corrección, pero sin eufemismos, expresé de forma pública mi preocupación y disgusto por la forma que se había tratado tan delicado suceso y el aprovechamiento sin miramientos que lo utilizaba la oposición política para su beneficio. Para ambos las familias eran lo de menos”. Hoy, catorce años después se pregunta si, nuevamente, las familias serán meros instrumentos.




domingo, 29 de enero de 2017

¿Qué fue de los asesinos de Atocha?

¿Qué fue de los asesinos de Atocha?
Lerdo de Tejada se fugó en 1979 y vive en Brasil. Fernández Cerrá cumplió 15 años y después desapareció en el anonimato. García Julia está en una cárcel de Bolivia por narcotráfico 

Crónica -El Mundo- 20 de enero de 2002 Anibal Malvar
Veinticinco años lo es todo si te los has pasado muerto. El 24 de enero de 1977, a las 22.45 de la noche, un comando fascista entraba en un despacho de abogados laboralistas del aún no legalizado PCE, y acribillaba a ocho letrados y a un auxiliar del bufete.

«Átame las alpargatas, morena mía, dáme el fusil /
que voy a matar más rojos que flores tienen mayo y abril».

Luis Javier Benavides, Enrique Valdelvira y Ángel Elías murieron en el acto. Luis Ramos, en el suelo y con las tripas fuera, le decía a Miguel Ángel Saraiba: «Nos han matado, Miguel». Pero los dos sobrevivirían, como Alejandro Ruiz y Dolores González ésta perdió al hijo que llevaba dentro . Los otros dos que pudieron oírle, Francisco Javier Sauquillo (marido de Dolores) y Serafín Holgado, duraron un sólo día con vida en el hospital.



Los asesinos salieron mucho mejor parados, después de atarse las alpargatas y seguir al pie de la letra el resto de consignas de la cancioncilla falangista de guerra. El clima de ruido de sables de aquella España (aún se esperaba que Franco resucitara al tercer día), invitaba a la impunidad. José Fernández Cerrá, con su Browning F/N 9 mm. parabellum, Carlos García Juliá con su Star y Fernando Lerdo de Tejada entraron en el despacho, pusieron a los nueve ocupantes del bufete contra la pared y dispararon a cara descubierta.

Tras limpiar el portal de Atocha 55 de rojelios, ni siquiera se tomaron la precaución de huir de Madrid. Creían haber iniciado la II Santa Cruzada 40 años después, y poner tierra de por medio es de cobardes. La policía los detuvo, en consecuencia, sin dificultad, aunque los agentes rehusaron cobrar la recompensa a la que tenían derecho.

Ya antes del comienzo de la vista, a Fernando Lerdo de Tejada, sobrino de una secretaria de Blas Piñar (fundador de Fuerza Nueva), le concedió el juez instructor un permiso de fin de semana. El reo desmintiendo la semántica de su primer apellido no se reincorporó a la cárcel de Ciudad Real aquel 17 de abril de 1979 y, hasta hoy, permanece perdido en la noche de los tiempos. La huida fue fácil: primero se escondió en La Manga, donde su hermano Luis teníaUN NEGOCIOhttps://cdncache-a.akamaihd.net/items/it/img/arrow-10x10.png. Después partió hacia Francia en coche. Se sabe que en Perpignan le proporcionaron dinero, documentación falsa y un billete hacia Sudamérica. Presumiblemente, pasó varios años residiendo en Chile y, en la actualidad, fuentes cercanas a la familia lo sitúan en Brasil. Hoy podría haber regresado a España.Su delito prescribió en febrero de 1997.

Pero nadie ha sido capaz de dar cuenta de su paradero. Ni siquiera en El Toboso (Toledo), donde residen por temporadas su madre y sus hermanos. Al preguntar por él, muchos vecinos cuelgan el teléfono directamente. Otros responden con reservas: «Nunca más volvió aquí», afirma una amiga de la madre de Lerdo de Tejada que prefiere mantener el anonimato. «Si le preguntas por él, nunca dice dónde está. "Sabemos poco de él, pero bueno", es lo que me contesta siempre», añade. Su sobrino Francisco Javier Lerdo de Tejada, residente en Madrid, asegura no haber sabido de él desde entonces: «Apenas tengo recuerdos de él. Yo tenía entonces sólo cuatro años. No lo he visto desde entonces». Tampoco en Fuerza Nueva se supo nunca más de sus andanzas.

Fernández Cerrá y García Juliá sí fueron juzgados y condenados, cada uno, a 193 años de cárcel. El móvil del crimen del autodenominado Comando Hugo Sosa, vinculado a la Alianza Apostólica Anticomunista, se desveló como un escarmiento a los inspiradores de una huelga de transportes que se enfrentaba a los intereses del Sindicato Vertical. El secretario provincial del Transporte de Madrid, Francisco Albadalejo Corredera, fue condenado a 73 años de prisión por haber dado la orden a los asesinos. Leocadio Jiménez Caravaca ya fallecido, como el anterior fue quien suminstró las armas y cumplió una condena de cuatro años, dos meses y un día. La novia de Fernández Cerrá, Gloria Herguedas, fue condenada a un año de cárcel por complicidad. 

García Juliá, que aquella noche de 1977 fue el encargado de dar el tiro de gracia con su Star a Sauquillo y Holgado, no ha dejado de mostrar su ejemplaridad humana desde que, el 23 de septiembre del 91, el juez Ignacio Sánchez Ybarra decretara su libertad condicional tras 14 años de tambo en Villanubla. En agosto de 1994, solicitó permiso a la Audiencia Nacional para viajar a Paraguay atendiendo a una oferta de trabajo de la empresa Traflumar (Tráfico Fluvial y Marítimo).

El permiso le fue concedido por el juez José Luis Castro, pero lo revocó días después a petición de la Fiscalía. En diciembre de 1994, se solicitó formalmente su regreso a España, pero García Juliá no compareció. El 11 de mayo de 1996 era detenido por la policía boliviana bajo la acusación de tráfico de drogas. Lo delataron dosMULAShttps://cdncache-a.akamaihd.net/items/it/img/arrow-10x10.png(correos de los narcos) sorprendidos con 15 kilos de cocaína un día antes en un avión con destino a Zürich.La policía boliviana no pudo ver confirmada durante el juicio su sospecha de que los fondos recaudados por Juliá eran invertidos en la financiación de grupos parafascistas, Desde entonces, el ultraderechista permanece recluido en la prisión de alta seguridad de Palmasola (La Paz). El Gobierno español, a petición de Izquierda Unida, acordó solicitar su extradición tras su reunión de 20 de abril de 2001. Según el auto dictado por la Sala un año antes, tiene pendiente en España el cumplimiento de los 3.855 días de prisión que quedaron en el limbo de la culpa tras la revocación de su libertad condicional y su fuga. 

Por último, Fernández Cerrá cumplió 15 años de cárcel y salió con la condicional en 1992. Jaime Sartorius, que durante el juicio actuó como abogado de la acusación y que fue quien introdujo en el PCE a cuatro de los cinco abogados asesinados, afirma haber escuchado rumores de que, tras su puesta en libertad, Cerrá había estado vinculado a una empresa de seguridad. «Imagínese, una persona así en una empresa de seguridad, me parece espantoso», dice. Ni él ni el resto de abogados implicados en la causa pueden dar cuenta de su paradero: «Nos hemos intentado olvidar de esa gentuza».

SERVICIOS SECRETOS
Como el resto de letrados de la acusación, considera que el crimen no fue aclarado del todo durante el proceso: «Faltan las cabezas pensantes. No nos dejaron investigar. Para nosotros, las investigaciones apuntaban hacia los servicios secretos, pero sólo apuntaban. Con esto no quiero decir nada».

El también letrado acusador José Luis Núñez Casal recuerda que «las pruebas con respecto a la munición no fueron facilitadas por el instructor. Cómo consiguieron las armas es el hilo que no se pudo desbrozar. Por eso no se pudieron demostrar responsabilidades políticas».

Miguel Ángel Saraiba, uno de los supervivientes de la matanza, también señala que «aún nadie sabe nada de posibles responsabilidades políticas. Pero ellos no tenían capacidad logística» para preparar el crimen. «Es de suponer que los mentores de aquellas personas eran... sonaron varios nombres... Prefiero no hablar. Soy víctima de mi tiempo y tengo miedo. Un miedo controlado, pero que a veces supera la media de mi resistencia. No soy un héroe, y he recibido amenazas los que no están conformes con la trayectoria del grupo político al que pertenezco. Por eso prefiero no hablar», insiste.Veinticinco años después.

EL DELITO PRESCRIBIÓ
Desde febrero de 1997, Lerdo de Tejada y Fernández Cerrá son hombres libres. No así García Juliá (en la imagen, a la izquierda del entonces dirigente de Fuerza Nueva Blas Piñar), prófugo que «debe» 3.855 días a la Justicia española

 

Atocha...aquel 24 de enero.

ATOCHA
24 Ene 2017
Público
Manuel Garí
Economista. Miembro de Podemos y militante de Anticapitalistas
El día de hoy, 24 de enero, nos exige más que cualquiera otro del año realizar tres acciones: recordar a las víctimas de Atocha 55 y reivindicar su lucha, exigir toda la verdad sobre los asesinos y sus mandantes, y reflexionar sobre las consecuencias políticas que conllevó la respuesta al atentado.

Cuarenta años después de la matanza fascista, la generación de militantes antifranquistas tenemos vivo el recuerdo de nuestros compañeros (conocidos o no) tiroteados. Eran los nuestros. Compartíamos mucho, empezando por un sentido del compromiso militante entendido como, en expresión de Daniel Bensaïd, “lealtad y responsabilidad hacia los desconocidos”. Eran gente que nos defendía desde el despacho laboralista, gente que codo con codo con nosotros estaba construyendo una organización sindical singular entonces por su combatividad y configuración, Comisiones Obreras (CC.OO). Gente que soñaba con el socialismo aunque tuviéramos estrategias distintas y estuviéramos en partidos diferentes. Nos unía la lucha y la desgracia. También la esperanza.

Eran nuestra gente
Para nosotros eran Enrique, Luis, Javier, Serafín y Ángel a los que ya no veríamos más. Y también eran Miguel, Alejandro, Luis y Lola. Tiene razón Rosa Montero cuando afirma en primera persona que aquella generación que vivió con ilusión y miedo el tardo franquismo y el post franquismo quedó “marcada” por el brutal ataque a tiros de las browning y las star.

Sin edulcorar el pasado, ni esconder que también hubo personajes y grupos con trazas sectarias, cabe afirmar que la mayor parte de esa generación política tenía un sentido de pertenencia común y solidaridad. Cuestión esta que podría ser útil para la reflexión actual en el asfixiante marco cultural neoliberal que entroniza el individualismo y la competencia entre quienes solo son fuertes si actúan en grupo y cooperan.

Para esa generación no es retórico ni ritual el repetido lema “Atocha, hermanos, no os olvidamos”. Nosotros no olvidamos. ¿Rencor? ¡No!: Memoria y precaución. Máxime cuando, de nuevo, suenan en Europa y en Estados Unidos discursos autoritarios, patrióticos, xenófobos, excluyentes, oligárquicos, austeritarios y profundamente contrarios a los intereses de las clases subalternas.

Atocha 55, caso no cerrado
Tuve la suerte y la honra de compartir militancia con Francisco Javier Sahuquillo Pérez del Arco y con Dolores González Ruiz en nuestra etapa universitaria, ellos en Derecho y yo en Económicas, ambos en el Frente de Liberación Popular (FLP), los tres nos unimos aún más tras el asesinato a manos de la policía de Enrique Ruano y luego tomamos opciones diferentes. Ellos el Partido Comunista (PCE), yo la Liga Comunista Revolucionaria (LCR), pero la amistad y el afecto perduró. Años después, concretamente en junio de 2014 en un largo viaje por Noruega Lola y yo tuvimos ocasión de hablar sobre el pasado (auge y decadencia de los partidos clásicos del movimiento obrero), el presente (irrupción del 15 M y el ascenso imparable de Podemos en el seno de la izquierda) y el futuro (volvía la esperanza, poco más se podía decir).

Ella no quería rememorar la tragedia (“me desbarataron mis sueños por segunda vez”) pero sí hablar del contexto. Ambos compartíamos dos conclusiones. En primer lugar que jamás se aclaró toda la verdad de lo sucedido ese 24 de enero. Y queda pendiente hacerlo. Pese a las dificultades en la investigación pudo sentarse en el banquillo de los acusados por primera vez a matones fascistas. Pero como declaró el abogado de la acusación Jaime Sartorius, no se pudo llegar a las cabezas pensantes. El juez de la Audiencia Nacional Rafael Gómez Chaparro obstaculizó que se pudiera establecer la relación entre los asesinos materiales y el aparato de estado, los servicios de inteligencia y la policía en los tiempos que ya era Presidente del gobierno Adolfo Suárez y era Ministro de Gobernación Rodolfo Martín Villa. Relación que sirvió a algunos de los fascistas para fugarse de la cárcel años después. El mismo aparato que gracias al “amnistía a cambio de amnesia” de Santiago Carrillo, pasó a formar parte básica del nuevo estado, esta vez, democrático. Atocha 55, caso no cerrado.

La segunda conclusión común no podía ser otra que calificar como mistificador y mentiroso el discurso oficial sobre la transición española, calificada por las élites políticas y económicas que sostienen el régimen de la reforma como de “incruenta” y “modélica”. El atentado del despacho laboralista, así como los asesinatos ocurridos los días anteriores de Arturo Ruíz García a manos de los Guerrilleros de Cristo Rey y María Luz Nájera Julián por disparos de la policía son muestras, junto a tantas otras tropelías anteriores y posteriores, que la oligarquía no estaba dispuesta a ceder el poder ni a ser juzgada por sus desmanes. No existía una hoja de ruta para la transición en la izquierda pero sí en el lado franquista: si el cambio era imparable, al menos que lo gobiernen los de arriba.

De la ruptura democrática a la reforma pactada
La reacción popular ante el asesinato fue muy importante en las empresas de todos los sectores en los principales núcleos fabriles dónde se realizaron numerosos paros, pero la Coordinadora de Organizaciones Sindicales (COS) avalada por el prestigio y la fuerza de uno de sus componentes, CC.OO. puso todo su empeño en que no adquiriera la dinámica de huelga general ni saliera del recinto de trabajo: nada de convocatorias en la calle. El día del sepelio, 26 de enero, tras el homenaje multitudinario en el que el PCE demostró tanto su fuerza como su voluntad de que la protesta estuviera perfectamente acotada, las fuerzas procedentes del régimen franquista aceleraron sus planes y dos meses después legalizaron al partido de Carrillo. Así y todo hubo importantes movilizaciones en Madrid y en otras ciudades que hicieron caso omiso a esas directrices, pero también se puso en evidencia la ausencia de fuerza suficiente a la izquierda del PCE y en el seno de CC.OO. para poder orientar en otro sentido el movimiento popular.
Paradójicamente el PCE comenzó a deslizarse por la rampa del declive el día que mayor capacidad de movilización y organización había demostrado. Su orientación “congeló” la correlación de fuerzas existente, lo que para las fuerzas populares significó un retroceso. Carrillo mencionó el riesgo de involución y de intervención de los militares de haber lanzado una ofensiva política movilizadora por la ruptura democrática.

No sabemos qué habría ocurrido porque no ocurrió, pero no parece probable que tras el 25 de abril portugués, la caída de los coroneles griegos, la creciente movilización obrera, estudiantil en todo el Estado y el resurgimiento de la cuestión nacional en Cataluña y Euskadi acompañada de la creciente pérdida de legitimidad del régimen posfranquista, y teniendo en cuenta la situación crítica de la economía española desde 1973, la solución de los poderes económicos hubiera sido auspiciar un auto golpe militar. Lo que es seguro es que se podían haber adoptado otras decisiones y orientaciones por parte del movimiento popular. Ni este caso ni en ninguno es verdad el mantra de que “lo que se hizo es lo único que se podía hacer”. Esta es una visión determinista de la historia que sólo sirve para justificar lo ya hecho.
La Ley 1/1977 de 4 de enero, para la Reforma Política fue la gran ganadora desde el punto de vista político, por eso la interpretación que hizo Jaime Sartorius de que la reacción al atentado cambió la hoja de ruta de la transición porque supuso la legalización del PCE y el avance del proceso democrático, cuanto menos es incompleta. Habría que añadir: el PCE abandonó el proyecto de ruptura democrática y aceptó, no una ruptura pactada como a veces se ha formulado, sino una reforma pactada.

El régimen salió limpio de polvo y paja. Sus élites políticas y económicas configuraron las élites de la democracia. La secuencia posterior es conocida: Ley de Amnistía, elecciones generales de junio de 1977, Pactos de la Moncloa, Constitución de 1978… que si con una mano dieron derechos y libertades (individuales, sociales, sindicales, políticos), con la otra limitaron su extensión y cercenaron el desarrollo posterior de los mismos tanto en las entonces llamadas nacionalidades como en la dimensión socio-económica de los derechos. En lo que sí tiene razón Sartorius es que el 24 y el 26 de enero de 1977 marcan un punto de inflexión, un antes y un después en la lucha por las libertades.

El cierre de la crisis del tardo franquismo fue satisfactorio para sus mentores, se desarrolló una suerte de gran consenso “constitucionalista” que tiene como primera seña de identidad el respeto por el régimen económico capitalista, que acepta la jefatura monárquica y que ha subordinado sus políticas a las provenientes de Bruselas. Pero algún hilo se dejó suelto y años después desde el 15 M y desde los procesos vasco y catalán y particularmente, entre las nuevas generaciones políticas, ha vuelto a plantearse la necesidad de otra Constitución. Así se las gasta el viejo topo de la historia.

sábado, 28 de enero de 2017

Mentiras para ser una mujer de verdad

¡Fuera complejos! Viñetas para desmontar mentiras sobre las mujeres de verdad
El Huffington Post  |  Por Elena Santos
26/01/2017

"Las chicas no tenemos pelos". "Las mujeres somos delgadas". "Si salimos sin arreglar, nos morimos". No son afirmaciones, sino mitos que desmonta con ironía y viñetas la ilustradora y estudiante de Medicina Rocío Salazar en su primer libro, Mentiras para ser una mujer de verdad.

Hace un par de años acompañó su decisión de no volver a someterse a la cera, a la cuchilla ni a cualquier otro método con una serie de ilustraciones sobre la depilación femenina que se hizo famosa en las redes sociales.

Ahora trata muchos otros temas, desde la menstruación, al envejecimiento o el maquillaje. "Hay una viñeta en el último capítulo de una chica tumbada con mensajes como 'Quítate los pelos, fuera las cartucheras o no serás una mujer de verdad'. Sirvió para dar título al libro y para abrir el abanico", explica Rocío Salazar a El Huffington Post por teléfono. "También fue por petición popular porque en las viñetas de la depilación me comentaban 'Sí, y las canas, ¿qué? ¿Y los michelines?", añade.

Fue la editorial Lunwerg quien le propuso hacer el libro que le apeteciera. "Entre que me contactaron y que el libro entrara en imprenta pasó un año: tres meses definiendo el concepto, seis meses dibujando a muerte y tres meses corrigiendo y modificando", recuerda.

Salazar ya predicaba con el ejemplo al no depilarse, pero también lleva a la práctica los mensajes de sus nuevas viñetas, como no ir maquillada o no teñirse el pelo si no se siente cómoda con ello. "Me están saliendo canas y ya me están diciendo '¿Y no te vas a teñir?". Reconoce que en ocasiones la paciencia se le acaba. "Las miradas en el bus me están hartando ya", dice en referencia a su vello corporal.

APOYOS Y CRÍTICAS
Sus viñetas despiertan todo tipo de reacciones en redes sociales. "Ahora estoy encontrando más apoyos, aunque críticas también hay. El otro día había un comentario en una noticia sobre el libro en plan 'Oh, sí, nos has abierto los ojos a muchos', diciendo que qué chorrada", apunta. "También hay comentarios de 'Vaya tía guarra' o de chicas que dicen 'A mí no me tienes que decir qué tengo que hacer".

En cambio recuerda con cariño el éxito de otro de sus dibujos. "Hay una viñeta acerca del peso que dice 'Camina como si fueras preciosa' que la compartió mucha gente. Fue bonito porque hubo chicos que etiquetaron a sus novias, ellas les ponían corazones...", comenta.

"También tuvo críticas porque hubo quien dijo '¿Y si soy delgada ya no soy preciosa?' pero ese no es el mensaje", recalca. "Claro que puede ser preciosa, la cuestión es que una chica con más peso también".

Salazar añade otra idea al debate: "Hay gente forrándose a costa de nuestros complejos y una enorme maquinaria (publicidad, medios de comunicación...) para hacernos llegar ese mensaje". Aquí puedes ver más viñetas de Mentiras para ser una mujer de verdad: