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viernes, 31 de octubre de 2025
De
la comparecencia del Presidente en el senado han quedado respuestas
“muy importantes”
que aún hay medios dándoles vueltas
¿Quién iba en el peugeot con Pedro?
¿En qué planta está el despacho de la gerente del PSOE???
¿Si se compromete el Presidente a un careo con Aldama?? Y…
La marca de las gafas del Presidente
Se pueden sentir orgullosos Feijoo y sus senadores del resultado de esta comparecencia que promovió personalmente el Sr Feijoo
El
PP ha vuelto a hacerlo: montar un circo para acabar siendo el payaso
principal.
Feijóo llevó a Sánchez al Senado creyendo que iba a hundirle, pero salió retratado su propio partido, su fracaso estratégico y su líder gris.
Cinco horas de interrogatorio, gritos, interrupciones y un “renuncio a todas las preguntas” que ya es historia del parlamentarismo cutre.
Sánchez salió ileso.
El PP, humillado por su propia torpeza.
Mientras tanto, Aznar presentaba su libro en Madrid rodeado de viejos fantasmas: Acebes, Mayor Oreja, Soria…
Y en primera fila, Feijóo, escuchando cómo su mentor advertía que no se puede “frustrar a los españoles con una moción de censura fallida”.
Aznar, que calificó el discurso de Vox sobre deportaciones masivas como “populista”, pidió “una inmigración buena, legal y vinculada a las tradiciones españolas”.
Traducción: conservadurismo con cosmética, nostalgia de imperio, ni rastro de política social.
Pero el mensaje más demoledor fue el que no pronunció: en 250 páginas de libro no menciona ni una sola vez a Feijóo.
Habla de “liderazgos fuertes”, de “autenticidad” y de “proyectos reconocibles”.
Nada de eso lo ve en Génova 13.
El PP está atrapado entre su pasado y su caricatura.
Feijóo copia el discurso de Vox, Aznar le dice que no lo haga, y los votantes miran con indiferencia.
No hay liderazgo. Solo gestión del fracaso.
El Senado fue el espejo: preguntas improvisadas, acusaciones vacías, un presidente de la comisión regañando a su propio senador.
Cuando el objetivo es sacar “un corte televisivo” y ni eso consigues, es que la política se ha convertido en marketing barato.
Sánchez, con calma, recordó:
“Solo hay un Gürtel. Y su sede está en Génova 13, pagada con dinero corrupto.”
Silencio.
La derecha volvió a escuchar el eco de su propia historia.
El PP intentó “pillar” al presidente y acabó confirmando que no tiene caso, ni liderazgo, ni relato.
Ni siquiera Aznar cree ya en su heredero.
Feijóo prometía “orden y moderación” y hoy sobrevive a base de gestos desesperados.
Su moción moral, su Senado inquisidor y su bancada ruidosa solo prueban una cosa:
el PP se ha convertido en su propia oposición.
Apoyar medios libres como Spanish Revolution permite contar esto sin maquillaje, sin despachos y sin miedo.
PP: el gran fiasco
Francisco Vidal Asensio
CARTA DE UNA ZORRA,
dirigida al juez de la Audiencia Nacional y motivada porque este juez ha dictado una sentencia en la que afirma: «Que llamar zorra a una mujer no es delito, ni falta, ni nada, porque quien usa ese adjetivo en realidad lo que quiere decir es que dicha mujer es astuta y sagaz». En base a ello, he aquí el escrito que le ha remitido una ciudadana:
"Estimado juez :
El motivo de esta misiva no es otro que el de solicitarle amparo judicial ante una injusticia cometida en la persona de mi tía abuela Felicitas y que me tiene un tanto preocupada. Paso a exponerle los hechos:
Esta mañana mi tía abuela Felicitas y servidora nos hemos cruzado en el garaje con un sujeto bastante cafre que goza de una merecida impopularidad entre la comunidad de vecinos. Animada por la última sentencia de su cosecha, que le ha hecho comprender la utilidad de la palabra como vehículo para limar asperezas, y echando mano a la riqueza semántica de nuestra querida lengua española, mi querida tía abuela, mujer locuaz donde las haya, le ha saludado con un jovial "que te den, cabrito".
Se ha puesto como una energúmeno, oiga. De poco me ha servido explicarle que la buena de mi tía abuela lo decía en el sentido de alabar sus grandes dotes como trepador de riscos, y que en estas épocas de recortes a espuertas, desear a alguien que le den algo es la expresión de un deseo de buena voluntad.
El sujeto, entre espumarajos, nos ha soltado unos cuantos vocablos, que no sé si eran insultos o piropos porque no ha especificado a cuál de sus múltiples acepciones se refería, y ha enfilado hacia la comisaría más cercana haciendo oídos sordos a mis razonamientos, que no son otros que los suyos de usted, y a los de mi tía abuela, que le despedía señalando hacia arriba con el dedo corazón de su mano derecha con la evidente intención de saber hacia dónde soplaba el viento.
Como tengo la esperanza de que la denuncia que sin duda está intentando colocar esa hiena -en el sentido de que es un hombre de sonrisa fácil- llegue en algún momento a sus manos, le ruego, por favor, que intente mediar en este asunto explicándole al asno -expresado con la intención de destacar que es hombre tozudo, a la par que trabajador- de mi vecino lo de que las palabras no siempre significan lo que significan, y le muestre de primera mano esa magnífica sentencia suya en la que determina que llamar zorra a una mujer es asumible siempre y cuando se diga en su acepción de mujer astuta.
Sé que es usted un porcino -dicho con el ánimo de remarcar que todo en su señoría son recursos aprovechables- y que como tal, pondrá todo lo que esté de su mano para que mi vecino y otros carroñeros como él -dicho en el sentido de que son personas que se comen los filetes una vez muerta la vaca - entren por el aro y comprendan que basta un poco de buena voluntad, como la de mi tía abuela Felicitas, para transformar las agrias discusiones a gritos en educados intercambios de descripciones, tal y como determina usted en su sentencia, convirtiendo así el mundo en un lugar mucho más agradable.
Sin más, y agradeciéndole de antemano su atención, se despide atentamente, una víbora (evidentemente, en el sentido de ponerme a sus pies), enviándole mis más respetuosos saludos a las zorras de su esposa y su madre"
Egunones a montones
A LOS QUE JUEGAN CON LA VIDA Y CON LA VERDAD
A las nueve y media de la noche, cuando el agua ya se había llevado a decenas de personas, Feijóo todavía no había llamado a Mazón.
Ahí están los registros, las pruebas, los horarios.
Y sin embargo tuvo la cara de decir que lo sabía “en tiempo real”.
En tiempo real, si,en tiempo real de su mentira.
Mientras tanto, Mazón
comia en un restaurante, ajeno al desastre, al barro y al miedo.
La gente gritaba pidiendo ayuda, el agua arrastraba cuerpos, y él,estaba “desconectado”.
Esa es la palabra: desconectado del pueblo, de la realidad, de la vida.
Y luego está Ayuso, la de los “abuelos que no se tocan”,
pero que firmó el protocolo de la vergüenza,aquel que impidió derivar a miles de ancianos a los hospitales durante la pandemia.
Murieron solos, aislados, en residencias convertidas en morgues,
mientras ella se hacía fotos vendiendo libertad.
Bonilla, por su parte, recortó el cribado de cáncer de mama en Andalucía.
Miles de mujeres quedaron sin diagnóstico precoz.
Algunas se enteraron tarde, cuando ya no había remedio.
Y todavía tiene el valor de llamarlo “eficiencia sanitaria”.
Todos cortados por la misma tijera:
Feijóo, Mazón, Ayuso, Bonilla…Y Abascal que gobierna con ellos en algunos casos .
Una derecha de salón, de plato de televisión,
que solo pisa la calle cuando hay cámaras,
que vive del dolor ajeno y lo convierte en propaganda.
Y mientras tanto, hablan de “vida”, de “familia”, de “patria”.
Pero lo suyo no es amor a la patria, es amor al poder.
Y lo de la familia solo les importa cuando da votos o contratos.
No hace falta un fusil para matar.
Basta con una firma, un recorte, una llamada que no llega a tiempo.
Eso también mata.
Y eso también deja cadáveres.
La gente tiene que abrir los ojos.
Porque votar a quienes mienten, abandonan y manipulan es votar contra la vida.
Contra la verdad.
Contra uno mismo.
Ya está bien de que nos tomen por tontos.
Ya está bien de que nos hablen de libertad mientras privatizan, recortan y se lucran.
El pueblo está cansado de ser usado, engañado y enterrado en silencio.
La dignidad no se vota cada cuatro años se defiende cada día.
Y esa defensa empieza con la memoria, con la palabra y con la verdad.
Sabemos que son cientos, sino miles, de dioses los que el hombre ha inventado o creado desde el neolítico para adelante. Y todos sus respectivos creyentes, aseguraban y aseguran, que sus dioses propios eran los más poderosos y verdaderos. Por supuesto, huelga agregar que nunca nadie pudo mostrar una sola evidencia de la veracidad de sus afirmaciones, todo quedaba cubierto bajo el manto de la fe religiosa y la santa y pura credulidad totalmente enemistada de la razón y la lógica.
Se llama Alejo Miranda de Larra y es senador del PP con un sueldo de 133.000€ de dinero público. Ha interrogado a Pedro Sánchez. Ha sido mano derecha de Ayuso y estuvo detrás del pelotazo urbanístico de la Operación Valdebebas y del Hospital fantasma del Zendal con el capo Florentino Pérez.
Tu que opinas...
Un mes prepandose el discurso este discapacitado elegido como el más idóneo.
Sánchez y "lo de las gafas": el meme que resume un enfrentamiento político
El presidente de Gobierno deja momentos de todo tipo en su comparecencia en el Senado
ElPlural
P.U.
31-10-25
La comparecencia del presidente del Gobierno en el Senado dio y seguirá dando para muchos. Pedro Sánchez sale victorioso del interrogatorio con el que el Partido Popular (PP) pretendía sentenciarlo, en el marco de la comisión del caso Koldo. Una derecha furibunda y exaltada se pasó de frenada en sus ataques y el secretario general de los socialista optó por vestirse de recortador. Una pose cargada de sarcasmos y coronada con unas gafas que, tras cinco horas de circo, fue el clavo ardiendo al que se agarró la oposición. Y una vez más se quemaron.
Entre los “se las lleva dobladas” del representante del PP, el nervioso Alejo Miranda, y las magufadas de Vox, al número dos de Alberto Núñez de Feijóo no le quedó otra que aludir al estilo del presidente. “Sánchez empezó necesitando gafas para ver de cerca y terminó pudiendo leer sin ellas”, resumió Miguel Tellado la debacle. Lo mismo le sucedió a las diferentes redes sociales de la propia formación y de sus enchupitadas juventudes, perdidas entre dos patillas. Y una vez más, el jefe del Ejecutivo recogió el guante y golpeó con él la cara de sus adversarios.
“Lo de las gafas”, compartió Sánchez en sus redes sociales tras ver el revuelo, acompañando la publicación de un enlace. Un vínculo que redirige al Instagram de una pequeña tienda de gafas ubicada entre la Plaza Mayor de Madrid y el Teatro Real. Gafas Vintage, como se denomina la óptica, respondió al momento compartiendo una publicación, en la que hizo constar el revuelo mediático levantado por su producto y que cerró la respuesta del secretario general del PSOE a la cuestión de sus lentes.
“Aclarando el ‘tema del día’, las gafas de Pedro Sánchez son unas Dior Monsieur vintage que le vendimos hace unos cinco años”, explicaron desde la tienda. “El precio de la montura ronda los 250 euros y, a juzgar por las imágenes, las gafas se mantienen como nuevas”, añadieron, zanjando que, por esta calidad y resistencia, “todos los medios de comunicación se han creído que las estrena hoy”.
Sin embargo, los detalles no se detuvieron ahí, ya que todavía quedaba una entrevista concedida por el vendedor de las gafas. "Son más baratas que las Dior de hoy en día y de mejor calidad”, explicó Jorge sobre su producto, asegurando que su precio es “normal para una gafa”. “No se ha llevado las más caras ni de lejos. Es el precio medio”, continuó en los micrófonos de la Cadena Ser.
Sobre el presidente del Gobierno profundizó algo más. “Es un cliente fiel. Viene desde antes de ser presidente. Estas son unas gafas que compró hace cinco años”, reconoció. “Es tranquilo, humilde y muy buen cliente. Se deja aconsejar, tiene buen criterio, pero admite recomendaciones", se despidió el vendedor al que la derecha le ha dado la mejor promoción de su vida.
jueves, 30 de octubre de 2025
El Supremo ordena que el ministro franquista, Utrera Molina, vuelva a tener la Medalla de Oro de la Provincia de Sevilla
El TS anula la orden por la que la Diputación de Sevilla retiró la medalla al suegro de Ruiz-Gallardón y destacado dirigente falangista
ElPlural
Juan Luis Valenzuela
19-10-25
El Tribunal Supremo ha decidido restituir la Medalla de Oro de la Provincia al exministro franquista José Utrera Molina, cancelando la retirada acordada en 2016 por la Diputación de Sevilla. El fallo subraya que no se demostró que la distinción de 1969 estuviera vinculada a su papel en el régimen, sino que se justificó por su labor como gobernador civil y el “progreso” que se le atribuía.
Así, casi diez años de litigio terminan con una recompensa para uno de los hombres fuertes del franquismo y suegro del exministro de Justicia Alberto Ruiz-Gallardón, que, casualmente, acapara ahora menciones al recordar que siendo ministro de Justicia con Rajoy, tuvo que dimitir tras intentar derogar aspectos de la ley del aborto de Zapatero para volver al modelo de la ley de 1985, en la que las mujeres tenían que alegar motivos para justificar su decisión.
Falangista hasta en su sepelio
La fidelidad de Utrera Molina al franquismo no murió con él. Su funeral en Nerja, en abril de 2017, fue un auténtico homenaje al régimen con cánticos del ‘Cara al Sol’, exhibición de símbolos falangistas y una celebración que la Junta de Andalucía y asociaciones memorialistas calificaron como acto de “exaltación del franquismo”. La Fiscalía de Málaga archivó la denuncia presentada por Podemos. Pareciera que en España, a veces, glorificar el franquismo sigue siendo prácticamente gratuito.
Carrera de un hombre del régimen
Málaga lo vio nacer y Nerja lo vio morir, con 91 años, después de una carrera política que habría hecho sonrojar a cualquier demócrata. Gobernador civil de Ciudad Real, Burgos y Sevilla, subsecretario de Trabajo, ministro de la Vivienda, ministro Secretario General del Movimiento y vicepresidente del Gobierno, Utrera Molina pasó su vida sirviendo al dictador Franco y a los principios falangistas.
Tras el asesinato de Carrero Blanco, asumió la Secretaría General del Movimiento con Carlos Arias Navarro y, tras la muerte del dictador, votó en contra de la Ley para la Reforma Política que ponía fin a los Principios Fundamentales del Movimiento. Siempre fiel, siempre falangista, siempre al servicio del régimen.
Impunidad prolongada y homenajes
Miembro del llamado “Búnker” y del patronato de la Fundación Francisco Franco, fue nombrado Caballero de Honor en 2012. Intentó entrar en la democracia como candidato al Senado por Alianza Popular en 1977, sin éxito. En 2014, la jueza argentina María Servini emitió una orden de extradición contra él por su implicación en la ejecución de Salvador Puig Antich, pero la Audiencia Nacional española la ignoró.
La Ley de Memoria Histórica obligó al Ayuntamiento de Sevilla a retirar su nombre del callejero en 2016. Nueve años después, el Supremo decide devolverle la Medalla de Oro. La historia del franquismo parece que aún en democracia, a veces, no se puede tocar.
TIEMPO DE CANALLAS
Ser amable con los canallas constituye una ofensa a la virtud. A propósito de la polémica desatada por El odio de Luigse Martín, Juan del Val afirmó que la literatura está por encima del dolor de una madre. Nada, absolutamente nada, está por encima del dolor de una madre. Val se ha burlado de los animalistas y ha exaltado las corridas de toros. Solo por eso merece ser vituperado. Su comentario sobre el dolor de las madres corrobora su indignidad moral. Es un mierda y lo que escribe no merece otro calificativo.
El Premio Planeta no es fruto de la deliberación de un jurado. Se trata de una decisión empresarial. Lo sé porque me lo han contado varias personas que lo han recibido. Me sorprende que alguien lo ignore. El mundo editorial es una ciénaga. La corrupción es la norma, no la excepción. Juan del Val no es un escritor. Escritores son figuras como Juan Marsé o Vargas Llosa, nos caigan mejor o peor. A Vargas Llosa tuvieron que pagarle un dinero extra bajo mesa para que aceptara el premio (querían aprovechar el prestigio asociado a su nombre) y el resultado fue la peor novela del escritor peruano. En cambio, Miguel Delibes, un hombre bueno, lo rechazó, pues consideraba que los premios debían utilizarse para promocionar a los autores nóveles.
La literatura se está muriendo. Grandes escritores como Miguel Sánchez-Ostiz o Juan Gracia Armendáriz apenas venden libros, mientras auténticas nulidades no cesan de hacer caja con sus bodrios. Al igual que en la tele, la basura es lo que vende. Vivimos en una época de masas. El porcentaje de ciudadanos con criterio y espíritu crítico es ínfimo. No es algo casual, sino el efecto de la agresiva manipulación ejercida desde los medios.
Cabrearse con las injusticas es sano. Y cuando arpías como Ayuso cuestionan que se haya producido un genocidio en Gaza, las reacciones no pueden ser tibias. Hay que indignarse y decir claramente que solo un miserable puede afirmar algo así. Los niños de la Cañada Real llevan cinco años sin luz. Casi todo el mundo lo ha olvidado. Es motivo suficiente para perder la paciencia y expresarse con rabia. Ayuso es una rata y una corrupta. Probablemente, Valle-Inclán habría empleado esos adjetivos. Y el escritor gallego, era un maestro de la lengua. La moderación no es una virtud cuando se producen injusticias que claman al cielo.
Por cierto, ¿quién paga a ese legión de bots y cuentas falsas que atacan a las voces progresistas en ultraderecha y los empresarios que la financian. Los insultos de hoy mañana serán agresiones. Un nuevo fascismo ya se pasea impunemente por las redes y a veces por las calles. Y frente al fascismo, la tibieza y la moderación solo son estupidez o complicidad.
Rafael Narbona Monteagudo