Vicios privados, públicas virtudes.
Rodrigo de
Santos López, político burgalés, de 45 años, casado y con cinco hijos, edil del
PP, es conocido en Palma de Mallorca como uno de los políticos conservadores
más rectos del Partido Popular. Este católico activista cercano -según informó Levante-
al populista Movimiento Neocatecumenal -Kikos- aseguró en 2005 que el
debate sobre el matrimonio homosexual es un tema que “no interesa a nadie y
sólo beneficia a Rodríguez Zapatero”.
Estaba
considerado en el PP como un gestor "eficaz" y "honrado”. Sus
colaboradores más cercanos lo calificaban como un “hombre de confianza” de
Jaume Matas. Santos López fue el ideólogo de la campaña de acoso y derribo contra
el primer gobierno progresista de Baleares y ordenó el cierre en el año 2004
-desde la concejalía de Urbanismo- del club de alterne Top Models.
El País aseguraba que el ex teniente de alcalde
del Partido Popular es “un católico activista de los movimientos conservadores”
y en la pasada visita del Papa a España se retrató, “vestido de peregrino, con
mochila”, junto a monseñor Jesús Murgui, obispo de Mallorca.
Aseguraba
El Diario de Mallorca hablando de su “doble vida”, que los gustos
privados del edil del PP eran “de dominio público en el mundillo
político-periodístico”. Sin embargo la ex alcaldesa de Palma, Catalina Cirer,
no se enteraba de nada y calificó a De Santos como “una excelente persona,
cumplidor, trabajador y sobre todo honesto”, pero agregó sentirse “engañada” y
decepcionada: “Este no es el Rodrigo de Santos que yo conocía hasta ayer”.
La Fiscalía
Anticorrupción ha investigado el caso, llegando a la conclusión de que, con la
tarjeta que utilizaba como cargo municipal, de Santos se costeó las más de 80
visitas que realizó, entre otras, a Casa Alfredo, local situado en la
calle Ramón Servera Moyá. Una de ellas le costó 1.450 euros, importe que una
vez más no pagó de su dinero, sino del que podía gastar por su condición de
teniente alcalde.
El
presidente de la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y
Bisexuales (FELGTB), Toni Poveda, ha declarado: “Este caso refleja la doble
moral que existe en el Partido Popular”, “Estas personas -en referencia a
Rodrigo de Santos- tienen a un homófobo interiorizado, se odian a sí mismos por
ser homosexuales. Su propia homofobia les hace ser los más homófobos. Una vez
más se demuestra que los que se autoreprimen se acaban convirtiendo en los más
represores”.
Javier Rodrigo de Santos ya ha
devuelto al Consistorio la cantidad de 50.804 euros que presuntamente gastó
entre los años 2005 y 2007 en clubes de alterne gays de la capital balear y
Madrid a cuenta supuestamente del erario municipal. La alcaldesa de Palma, Aina
Calvo, inició una investigación el pasado 20 de febrero detectando movimientos
extraños en la tarjeta del ex regidor entre finales de 2005 y mayo de 2007,
tiempo en el que De Santos fue teniente alcalde y regidor de Urbanismo. Los
pagos se habían hecho desde las cuentas del Ayuntamiento, por lo tanto, fueron
pagados con dinero público.
Los
movimientos que aparecían en la relación de gastos de su tarjeta oficial
realizados entre las 4 y las 7 de la madrugada, se correspondían con pagos a
clubes de alterne gays, la mayoría en Mallorca. Casi todos estos locales tenían
páginas en internet, por lo que la policía pudo localizar a varios de sus
trabajadores que han identificado a De Santos como cliente habitual.
La doble
moral que caracteriza a este partido de
la derecha más recalcitrante queda en evidencia ante casos como este. A veces
sin el más mínimo recato. Nos viene a la
memoria el nombre del ex ministro Álvarez Cascos, ferviente defensor del
matrimonio (se ha casado tres veces) y enemigo acérrimo del divorcio. ¿Cuántos
alcaldes, alcaldesas, concejales y militantes de a pie del Partido Popular
todavía permanecen escondidos en los armarios? Generalmente suelen ser
creyentes practicantes y fervorosos (algunos padres y madres de familia) fieles
a la doctrina que marca la Iglesia, pero que solamente entienden aplicable a
los demás. En muchos casos, como puede ser este que hemos comentado, es del
dominio público” su doble moral.
Sabemos de
varios cargos políticos, (los conoce todo el mundo), que permanecen escondidos
por su condición sexual. No es ningún delito ni deshonra, pero militar en un
partido que está en contra de los homosexuales y las lesbianas, como es el caso
del PP, es ser además un masoquista o simplemente un(a) hipócrita. Recordemos
la desafortunada y famosa frase de la
esposa del antiguo presidente del gobierno José Mari Aznar, Ana Botella,
aquello de las manzanas y las peras: “El matrimonio entre homosexuales es
tratar de la misma manera lo que es diferente. Si se suman dos manzanas, pues
da dos manzanas. Si se suman una manzana y una pera nunca puede dar dos
manzanas, porque es que son componentes distintos. Hombre y mujer es una cosa
que es el matrimonio, y dos hombres o dos mujeres serán otra cosa distinta.”
Luis Viadel
