El exteniente Segura habla
claro: "Tenemos un Ejército franquista"
"Este libro también salpica a
la ministra Cospedal"
ElPlural
A.L.
Luis Gonzalo
Segura, el
exteniente del Ejército de Tierra que fue expulsado por denunciar
corrupción en la cúpula del Ejército español, ha sacado su tercer libro. El libro negro del Ejército español es un
ensayo sobre la existencia de corruptelas sistémicas, abusos y acosos,
privilegios anacrónicos, órganos de control cómplices y una cúpula militar
negligente en el seno del cuerpo militar.
Desde
ELPLURAL.COM hemos hablado con Segura a fin de acercarnos a la realidad de las
Fuerzas Armadas (FFAA) que dibuja el exteniente.
P
Este es tu
tercer libro en el que desvelas diversos tipos de corruptelas en el seno del
cuerpo militar. Chanchullos, facturas falsas… ¿Qué se puede descubrir en las
páginas de tu nuevo trabajo?
R.-
Lo más
importante es que el libro es un ensayo. Tiene más de 1.600 referencias y trata
todo lo que sucede en el mundo militar y, sobre todo, es la primera vez que se
hace un ensayo crítico de esta naturaleza. Puedes encontrar ensayos críticos de
todos los ámbitos, incluido de la Iglesia o del Vaticano, pero un ensayo
crítico sobre el Ejército español no existe. Creo que era necesario llenar ese
espacio y que la ciudadanía tuviese información al respecto. Por otro lado, era
necesario legitimar las dos primeras novelas, Un paso al frente y Código
Rojo, que bueno mucha gente decía que es ficción, porque efectivamente el
vehículo utilizado era la ficción. O decían que son exageraciones, o es
mentira, o esto no sucede…
Hasta ahora parecía que estaba
predicando en el desierto: ‘El teniente Segura dice o el exteniente Segura deja
de decir’. Entonces, este libro incluye 1.600 referencias, 850 páginas… Esto ya
no es lo que yo digo. Esto es lo que hay. Me he dedicado a cartografiar todo lo
que está publicado o todo lo que he considerado relevante de las Fuerzas
Armadas. Por ejemplo, se pueden extraer patrones muy claros. Hay más de 100
oficiales en las FFAA condenados por delitos. Es decir, ya no es que la
justicia militar prevarique, que prevarica, y en el libro se demuestra, es que
ese dato es revelador. Tenemos un Ejército de delincuentes, o de oficiales
delincuentes para ser más preciso. Ser un oficial y ser un delincuente no es un
problema, esto ya revela que algo no va bien. Cuando se cometen agresiones
sexuales o acoso sexual, existe total impunidad contra el agresor siempre y
cuando seas oficial, porque es uno de esos delitos que no impiden que los
mandos sigan siendo oficiales mientras que en la mayoría de los casos las
mujeres siguen en la calle. Es curioso. Tenemos a un Capitán condenado por
28 agresiones.
Dices que
este es el primer ensayo crítico sobre el Ejército español. ¿Crees que no se ha
hecho antes porque es información sensible?
R.-
Si. Pero
vamos, que está a la vista de todos. Esto es lo importante de este ensayo. Me
he dedicado a recopilar la información publicada. Es cierto que lo apoyo no
solo con vivencias y experiencias, con ensayos, manuales o boletines oficiales,
pero sobre todo es información publicada. Por poner un ejemplo, accidentes
aéreos. Hemos sufrido dos hace muy poco. Existe en general una enorme falta de
contexto. Si no se contextualizan esos accidentes, si no se ven las tasas y se
obtienen unos patrones claros… Si no se ve que la Comisión de Investigación
Técnica de Accidentes Aéreos Militares sistemáticamente concluye que hay un
fallo humano, pues claro es un accidente más y ya está. Y ‘jolín es una
pena’. Y otro accidente más y ‘jolín es una pena’. Pero claro, cuando se ven en
el contexto y uno dice ‘¡guau!’. Desde el año 2007, con la crisis se bajan los
presupuestos y además tenemos que afrontar los pagos de los planes especiales
de armamento, empiezan a caerse más naves de las que se caían con
anterioridad. Incluso de las que se caían en los 90’s y 80’s. Empiezan a
fallecer más militares. Y dices: ‘¿Qué está pasando aquí?’.
Esos son los patrones que te
permiten darte cuenta de algo incluso más terrible de lo que yo me podía
imaginar cuando denunciaba todo, porque es juntar las piezas del puzle. Por
ejemplo, tenemos documentado más de 3.500 millones de euros en material militar
almacenado por diferentes cuestiones. Carros de combate porque no hay dinero
para combustible, aviones porque no se puede asumir el aumento presupuestario,
helicópteros porque no hay personal para que los use… Auténticos disparates. Y
cuando tú esto lo ves blanco sobre negro puedes extraer una
P
La portada
del libro es muy llamativa: Franco, el Rey emérito y Felipe VI.
R.-
Hay una
línea de continuidad clara tanto en el Ejército como en la sociedad, porque al
final el Ejército es el reflejo de la sociedad. Y creo que en estos siete años
que estamos viviendo una clara involución en muchos sentidos que demuestra
hasta qué punto las conclusiones a las que se llega en el libro son ciertas. Al
final yo concluyo que tenemos un Ejército franquista. Efectivamente, nuestro
Ejército ha dejado de ser un Ejército interior, para golpes de estado, para ser
un Ejército exterior. Pero, el aspecto externo es lo que ha cambiado. Tenemos
un Ejército OTAN que es el Ejército turco, que te puedes imaginar que no es un
Ejército muy demócrata. Y un Ejército pseudo-OTAN, que es el saudita, que aunque
no sea OTAN funciona como tal a todos los efectos, es nuestro aliado. Y te
puedes imaginar que tampoco es muy demócrata.
Al final
nuestro Ejército funciona también como estos, no hay nada más que ver cómo los
sauditas están dejando Yemen, que a este paso no va a quedar piedra sobre
piedra. ¿Son buenos? Sí. ¿Y nosotros a nivel exterior hemos ganado un nivel de
experiencia y logística? Sí. Pero, ¿sigue siendo nuestro Ejército el mismo
Ejército en esencia que el Ejército de Franco? Totalmente.
Por esto decía antes que todas estas
aseveraciones que yo hacía antes, sin un contexto, sin un respaldo, parece que
estás insultando y que pretendes llamar la atención. En el libro se pueden
comprobar todas las manifestaciones franquistas, fascistas, filofranquistas o
filofascistas, que han hecho los altos mandos y cómo se van acumulando una tras
otra. Cómo nuestros militares, después del desfile del 12-O, muchos de ellos
terminan comiendo en Casa Pepe. O cómo hay 126 símbolos franquistas dentro de
nuestras FFAA. Empiezas a juntar todas las piezas del puzle, y ya después de
juntarlas, todas en muchos sentidos, las manifestaciones no parecen tan
gruesas.
P
¿Has
recibido algún tipo de amenaza, 'feedback negativo'...?
R.-
Si, claro. Para empezar, el martes tuve
que declarar porque me denunció la ministra Cospedal por calumnias. Supongo que
se archivará, pero evidentemente, aunque no me denunció por el libro, en el
trasfondo está el libro.
P
¿El libro
salpica también a Cospedal?
R.-
Claro. A ver, habla de todos los
ministros. Bono, Morenés, Alonso, Trillo. Nadie sale bien parado. Cospedal es
de la que menos se habla porque es la que menos lleva, pero ya ha demostrado en
este año que la regeneración dentro de las FFAA es absolutamente inexistente.
Lo único que ha aportado a ese círculo vicioso son los cristos y las misas. Y
es muy triste.
No hay comentarios:
Publicar un comentario