La curvatura del pene y la enfermedad de Peyronie: cómo
afecta a la sexualidad
El
problema en el pene que la mayoría desconoce (y afecta a muchos)
La enfermedad de Peyronie es un trastorno que
afecta al 8% de la población masculina. Es posible que sea congénito y que
desaparezca solo, pero sin tratamiento es grave
ElConfidencial
Autor
25/9/19
Reconocer que tienes un problema sexual puede ser bastante duro. Y sobre
todo si eres hombre. Hablar sobre disfunción
eréctil o Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS) todavía es tabú. ¿Y si se
trata de una afección tan poco conocida como la curvatura del pene? Muchos ni sabrán que la
padecen, pero llega a producir tanto dolor que dificulta el acto sexual,
afectando física y psicológicamente.
También llamada enfermedad de Peyronie, se trata de la formación
de una banda fibrosa en el tejido del miembro.
Cuando este entra en erección, provoca que se desvíe y produzca una línea
curva. Si bien es cierto que algunos penes adquieren esa forma de manera
natural, en el caso de esta patología, puede ser más significativa o provocar dolor.
El daño puede hacer que se evite tener relaciones sexuales o que, en caso
de tenerlas, sea difícil mantener el enderezamiento de la extremidad.
Es muy posible que no tengas relaciones sexuales o que sufras
disfunción eréctil, pero además hay muchas probabilidades de que padezcas estrés y ansiedad. En
ocasiones, la enfermedad desaparece sola. Pero, en la mayoría de los casos, se mantendrá estable o
empeorará. Puede ser necesario realizar un tratamiento si la
curvatura es lo suficientemente grave como para evitar tener sexo satisfactorio.
Síntomas y causas
Según la Clínica Mayo, los signos de esta
enfermermedad "pueden aparecer de repente o presentarse de manera gradual".
Los más frecuentes son el tejido cicatrical que puede sentirse debajo de la
piel como bultos planos o una banda dura. El pene puede curvarse hacia arriba, abajo o
doblarse hacia un costado. En algunos casos, cuando está erecto
puede tener una apariencia estrecha, con surcos o en forma de
reloj de arena, con una banda ajustada y angosta alrededor del cuerpo.
Si notas una incurvación o un bulto, debes
consultar con un urólogo especializado. Muchos médicos no saben como tratarla y
dicen que no es nada
También es posible que no puedas mantener la erección
y en muchos casos ni siquiera tener una. Como resultado de la afección también
es probable un acortamiento del miembro y fuertes dolores. Por lo
general, la dolencia mejora en un plazo de uno a dos años aunque el resto de síntomas
permanecen. En algunos casos, disminuye sin tratamiento.
No tiene un origen claro, pero intervienen varios factores.
Se cree que las causas de la enfermedad de Peyronie son las lesiones reiteradas
durante las relaciones sexuales, las actividades atléticas o como consecuencia
de un accidente, aunque muy a menudo no se recuerda ningún traumatismo
específico. Además, durante el proceso de curación se puede producir también un
nódulo palpable. Varios estudios la relacionan con alteraciones del sistema
inmune. Sin embargo, parece seguro que esta enfermedad no tiene relación con
ETS, ni es un tipo de cáncer.
Tratamiento
Hasta el momento los tratamientos
farmacológicos se han visto insuficientes para evitar la progresión
de la placa de fibrosis. Si notas una incurvación o un bulto, debes consultar
con un urólogo especializado. Muchos médicos no saben como tratarla y le dicen al paciente que no es
nada.
Los signos de esta enfermedad (en algunos
casos puede ser congénita) pueden aparecer de repente o presentarse de manera
gradual
Los
objetivos del tratamiento son aliviar el dolor, mejorar la incurvación
y detener la progresión de la enfermedad. No hay uno que haya demostrado ser
efectivo en todos los casos, pero recientemente se han presentado diferentes
trabajos sobre el efecto de las ondas de choque de baja energía. Estas consiguen,
en muchos casos, hacer desaparecer la dolencia y paralizar el avance de dicha
placa, evitando así la cirugía.
"Si bien este tipo de tratamiento se
aplica desde hace varios años en Europa con resultados clínicamente
comprobados, con la reciente incorporación de un sonoelastógrafía (técnica de
ultrasonido) de ondas de corte se pudo demostrar objetivamente la eficacia del procedimiento",
asegura César Eisner, radiólogo.
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